Avances tecnológicos y empleo local marcan el progreso del oleoducto Vaca Muerta Sur
El avance del oleoducto, que ya supera los 2,5 km diarios gracias a soldaduras robotizadas, impulsa el empleo local y posiciona a la Patagonia como centro de procesamiento y exportación energética.
Técnicos de la Secretaría de Hidrocarburos realizaron esta semana una recorrida por distintos frentes de obra del oleoducto Vaca Muerta Sur (VMOS) junto al personal de YPF, constatando los significativos avances de esta infraestructura estratégica que transformará el perfil productivo de la región.
Actualmente, el proyecto supera las 100 soldaduras automáticas diarias, lo que permite avanzar a un ritmo de 2,5 kilómetros por día.
El proyecto avanza a buen ritmo gracias a la tecnología.
El impacto del VMOS no solo radica en la tecnología de punta aplicada, sino también en su contribución al empleo local. En Sierra Grande, uno de los puntos neurálgicos de la obra, el 83% de los trabajadores contratados son rionegrinos.
"El monitoreo constante por parte del Estado provincial garantiza el cumplimiento de los estándares de calidad y seguridad en cada etapa de la construcción", explicó Amelia Lapuente, técnica de la Secretaría de Hidrocarburos.
Además, aseguró que este proceso combina innovación y precisión, los cuales son elementos fundamentales para una obra de esta magnitud.
Una obra beneficiosa
La construcción del oleoducto Vaca Muerta Sur no solo facilita la salida marítima del petróleo extraído, sino que inaugura una nueva etapa en la región: el crudo será procesado, exportado y generará valor agregado en la Patagonia.
Con una extensión total de 437 kilómetros, el oleoducto contará con una terminal en Punta Colorada y una capacidad inicial para transportar 180.000 barriles diarios, con proyección de alcanzar los 550.000 en apenas dos años.
Vaca Muerta Sur inaugurará una nueva etapa en la región.
En cuanto a su logística, la Planta de Doble Junta, que inicialmente operaba en Chichinales, fue trasladada al kilómetro 190 del trazado para avanzar con el segundo tramo de la obra. Esta planta une caños de 12 metros en tubos de 24, optimizando tiempos y recursos en la ejecución.
"Por primera vez, el gas y petróleo de Vaca Muerta no solo atravesarán nuestro territorio, sino que se procesarán, exportarán y generarán valor aquí, en la Patagonia", destacó Lapuente.
Para Lapuente, esta obra salda una deuda histórica: ya no solo se verá pasar los recursos, sino que se traducirán en empleo, infraestructura y desarrollo para los rionegrinos.
Fuente: Medios