Su salida deja vacante el cargo y se suma a la lista de funcionarios que abandonaron la gestión libertaria desde el inicio del gobierno de Javier Milei.
La Corte Suprema deberá recurrir a conjueces para garantizar su funcionamiento, ya que el Senado no ha aprobado los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, propuestos por el oficialismo.