La falta de nieve y precipitaciones amenaza al turismo y al ecosistema en Neuquén
El invierno atípico y la ausencia de lluvias en la cordillera impactan en los centros invernales, la generación eléctrica y el equilibrio ambiental, generando alerta para la temporada estival.
A poco más de un mes para la llegada de la primavera, el invierno en Neuquén continúa sin aportar precipitaciones significativas, especialmente nieve en la cordillera. Esta situación genera preocupación no solo por la baja temporada que atraviesan los centros invernales, que dependen del turismo, sino también por las proyecciones negativas para el verano debido a la escasez de agua en toda la región.
El sistema natural de almacenamiento de agua, que acumula nieve durante el invierno para liberar el deshielo en primavera y verano, está comprometido. Esto podría afectar la generación de energía eléctrica, las pasturas de cientos de crianceros que viven del ganado, y el equilibrio de los ecosistemas.
Además, la falta de humedad aumenta el riesgo de incendios forestales, recordando las graves tragedias del año pasado que costaron enormes esfuerzos para controlar.
Informes oficiales y datos preocupantes
El Ministerio de Agricultura de la Nación alertó que la superficie en sequía se duplicó en varias zonas de la Patagonia. Por su parte, el Servicio Meteorológico Nacional reporta precipitaciones muy por debajo de lo normal en el norte y noroeste patagónico, con temperaturas mínimas más altas que dificultan la acumulación de nieve. Investigadores del CONICET señalan déficits hídricos que en algunas cuencas llegan al 30% en comparación con promedios históricos.
Esta situación se replica en otras regiones del país, donde las lluvias y nevadas también fueron escasas para la época.
Un invierno atípico en Neuquén capital
Las temperaturas registradas en Neuquén capital en los últimos días y las previstas para la semana muestran valores inusuales para esta época invernal.
El pasado fin de semana, los espacios verdes y el Paseo de la Costa estuvieron llenos de personas disfrutando del sol con ropa liviana, como si fuera primavera. Escenas que difícilmente se hubieran visto en un agosto típico en la capital más grande de la Patagonia.
Expectativas y pronósticos
La Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) había esperado que agosto cambiara la tendencia, pero los primeros días del mes no muestran señales claras de mejora.
Si bien se registraron algunas lloviznas y nevadas tímidas en la cordillera, probablemente no serán suficientes para compensar la grave falta de agua acumulada durante el año.
Queda por ver si en las próximas semanas o a principios de septiembre se produce un cambio significativo en el clima.
Fuente: Medios