Alquileres en Neuquén: qué podría pasar tras el salto del dólar

El escenario político y económico tras el tropiezo del oficialismo en la provincia de Buenos Aires volvió a sacudir al dólar oficial, que se posicionó en $1450. Sin embargo, en Neuquén el impacto en los alquileres parece mucho más moderado de lo que se podría esperar.

Un empresario inmobiliario de la capital neuquina lo sintetizó en diálogo con medios locales: "No creo que tenga mucha incidencia lo que pase con el dólar. Los alquileres se manejan en función de la capacidad de pago de la gente. Todos siguen cobrando en pesos. Habrá que ver la inflación, pero el tipo de cambio no marca la diferencia", aseguró.

Inflación, demanda y escasez: las claves del mercado

Los números muestran que la presión sobre los alquileres en Neuquén es independiente del dólar. En junio, el rubro aumentó un 8,1%, cuadruplicando la inflación general (2,1%). En el primer semestre acumuló 65%, frente al 18,8% del IPC, y en términos interanuales trepó al 176,5%.

Hoy los valores superan ampliamente a los de Buenos Aires: mientras que un monoambiente en CABA ronda los $428.000, en el centro neuquino cuesta entre $700.000 y $800.000, y puede llegar al millón de pesos. Un departamento de un dormitorio cotiza entre $1.100.000 y $1.400.000, con expensas de más de $70.000.

La ubicación ya no define el precio: lo hacen la funcionalidad y la calidad del inmueble. La demanda supera de lejos a la oferta, a pesar del ritmo constante de nuevas construcciones.

Vaca Muerta y el crecimiento poblacional, el motor

El boom petrolero y la llegada de trabajadores y profesionales sostienen una presión permanente. Neuquén suma 21 familias nuevas por día y su población creció más de 12% en apenas tres años, lo que tensiona aún más el mercado.

Tras la derogación de la Ley de Alquileres, los contratos se firman libremente con ajustes trimestrales según el IPC, generando subas automáticas muy por encima de la inflación nacional. Además, desaparecieron los contratos viejos con valores más bajos: cada renovación implica un salto que deja a muchos inquilinos fuera de juego.

Políticas públicas y un mercado opaco

La Provincia lanzó el Monitor de Alquileres, con encuestas y un sistema de mediación para inquilinos y propietarios. Pero aún no logra frenar los incrementos ni evitar prácticas irregulares de inmobiliarias que operan sin habilitación.

En este contexto, más allá del sacudón político y el salto del dólar, el mercado neuquino sigue su propia lógica: los precios se rigen por salarios e inflación, no por el tipo de cambio. Y todo indica que, en el corto plazo, los alquileres seguirán aumentando muy por encima del promedio general.

Fuente: Medios