Claves para bajar gastos con electrodomésticos que consumen más agua y luz

Según expertos, algunos de los aparatos domésticos que más agua y electricidad consumen incluyen lavadoras, lavavajillas, inodoros y calentadores de agua. 

Sin embargo, con pequeños cambios de hábitos y mantenimiento adecuado, es posible minimizar el impacto.

Entre los aparatos que más agua utilizan están:

• Lavadoras: Pueden gastar entre 50 y 150 litros por ciclo, dependiendo del modelo y carga.
• Lavavajillas: Su consumo oscila entre 10 y 30 litros por ciclo.
• Inodoros: Los modelos antiguos usan hasta 12 litros por descarga, mientras que los modernos reducen el consumo a 3-6 litros.
• Duchas eléctricas: Pueden gastar hasta 20 litros por minuto.

Además, las lavadoras no solo destacan por su alto consumo de agua, sino también de energía. Estos aparatos pueden consumir entre 29 y 144 KWh/año, dependiendo del tipo de lavadora (manual, semiautomática o automática). Elegir un modelo eficiente y utilizarlo de forma responsable puede generar ahorros significativos.

Consejos para reducir el consumo de agua y energía

Para hacer un uso más eficiente de los recursos, es importante adoptar algunos hábitos en distintas áreas del hogar:

En la cocina

• Usa un recipiente para lavar los platos en lugar de dejar el grifo abierto.
• Aprovecha el lavavajillas solo con carga completa, ya que gasta menos agua que lavar a mano.
• Reutiliza el agua usada para lavar frutas y verduras para regar plantas.

En el baño

• Ducha rápida: Reducir el tiempo de ducha en 3-5 minutos puede ahorrar cientos de litros al mes.
• Cierra el grifo mientras te cepillas los dientes para evitar el desperdicio de hasta 12 litros por minuto.
• Instala una botella llena en la cisterna del inodoro para disminuir el consumo de agua en cada descarga.

En la lavandería

• Lava con carga completa para reducir la cantidad de ciclos semanales.
• Utiliza programas eficientes en tu lavadora, ya que algunos ciclos están diseñados para ahorrar agua y energía.

En el jardín y exteriores

• Riega en las horas adecuadas, preferiblemente temprano en la mañana o en la noche, para evitar la evaporación rápida.
• Elige plantas resistentes a la sequía, que requieren menos agua.
• Recoge agua de lluvia para regar el jardín o limpiar exteriores.

Revisiones y mantenimiento

• Repara fugas y goteos, ya que un grifo con fugas puede desperdiciar hasta 30 litros diarios.
• Instala reductores de caudal en grifos y duchas para disminuir el consumo sin afectar la presión.

Aplicar estos consejos no solo impacta en la economía familiar, sino también en la conservación de los recursos naturales. Reducir el consumo de agua ayuda a mitigar la crisis hídrica, mientras que optimizar el uso de energía disminuye la emisión de contaminantes y la deforestación.

Con pequeños cambios en nuestra rutina diaria, podemos lograr grandes beneficios para nuestro planeta y nuestro bolsillo.

Fuente: Medios