Disparaban al aire en la vereda y balean a un comerciante que les pidió que se retiren
El hecho sucedió cuando dos hombres estaban tomando alcohol en la vereda y disparando al aire. Cuando el comerciante les pidió que se retiraran la situación se tornó violenta.
La tranquilidad de la noche del martes del barrio Gregorio Álvarez se vio interrumpida por un nuevo hecho de inseguridad. Dos hombres conocidos en el ámbito delictivo, comenzaron a disparar al aire mientras consumían alcohol en plena vía pública. La situación se desbordó rápidamente cuando un comerciante, preocupado por el peligro, salió a pedirles que se retiraran del lugar, pero la respuesta fue muy violenta.
Según detalló el Comisario Inspector Cristian Cuevas, Coordinador Operativo de Zona Centro, la alerta fue recibida por la Comisaría 21, a través del cuartel de bomberos de la zona.
En ese momento, se confirmó que los disparos no solo generaron preocupación, sino que también hirieron a un hombre que, al intentar mediar con los agresores, terminó siendo víctima de la violencia.
En el lugar, quedaron los rastros de sangre del comerciante herido.
Alrededor de las 22:45, una mujer de 39 años manifestó que su esposo, que tiene un comercio sobre la calle Cipolletti, había sido herido por dos hombres. "Hicieron dos detonaciones al aire y consumían alcohol", explicó.
Según describió, el dueño del almacén salió a pedirles que se retiren del lugar pero los delincuentes "lo golpearon con el casco de una moto en la cabeza y le dispararon en la pierna izquierda". Tras oír los disturbios, los vecinos rápidamente salieron a la calle y los hombres escaparon a bordo de una moto Honda XR250.
Rápidamente, un vecino llevó a la víctima de 49 años a un hospital en su auto. Afortunadamente, las heridas no fueron de gravedad. "La bala entró y salió por lo que le hicieron las curaciones y le dieron el alta a las 2 de la mañana", explicó.
Afortunadamente ambos delincuentes fueron rápidamente identificados
Un móvil de la comisaría 3ra interceptó a los responsables en un domicilio que estaba a tan sólo 800 metros. Ambos, de 23 y 28 años, estaban junto a un menor de 15.
Allí, encontraron manchas de sangre en la moto y en la ropa de uno de los hombres. Y los tres, con antecedentes de robos y disturbios, fueron detenidos y puestos a disposición de la Fiscalía.
La moto tenía manchas de sangre.
Respecto al menor, si bien no fue mencionado por los testigos, la Policía va a verificar las cámaras de la zona para ver qué tipo de responsabilidad tuvo en el hecho. Por ahora, permanece en el Comisaría de Delitos Juveniles.
Este miércoles a la mañana, la Policía está a la espera de la autorización para realizar un allanamiento en el domicilio. En el operativo esperan encontrar el arma con el que agredieron al comerciante.
Fuente: Medios.
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