Desbaratan desarmadero con autos robados y armas en la meseta neuquina
La Policía descubrió un desarmadero clandestino con autos robados, armas y autopartes adulteradas en un predio aislado de la meseta neuquina. El operativo dejó al descubierto una red organizada que operaba con total sigilo.
En un paraje solitario de la Colonia Rural Nueva Esperanza, la Policía desactivó un desarmadero clandestino que funcionaba en total clandestinidad y bajo una estructura digna de una organización criminal.
Todo comenzó con un patrullaje de rutina, cuando un efectivo de la Comisaría 20° notó un Ford Ka rojo estacionado detrás de una casilla precaria. El vehículo coincidía con uno denunciado como robado, y esa sospecha fue suficiente para iniciar una investigación más profunda.
El vehículo despertó las sospechas de los efectivos policiales.
Con una orden de allanamiento autorizada por la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos, personal policial regresó al lugar con equipos especializados. Lo que hallaron superó cualquier presunción inicial: un predio de 50 por 80 metros, aislado, sin electricidad y sin viviendas cercanas, donde operaba un cementerio de autos robados.
En el lugar se encontraron más de diez vehículos en proceso de desarme, entre ellos dos camionetas Ford Ranger con pedido de secuestro, una moto XR150 con numeración limada y el motor adulterado de un viejo Ford Falcon.
Además, siete de los vehículos presentaban patentes falsas o números de chasis modificados.
La Policía encontró varios vehículos en proceso de desarme.
El hallazgo más preocupante fue el arsenal oculto dentro de las casillas: una carabina calibre .22, un revólver del mismo calibre, más de 50 municiones y piezas sueltas que podrían ser utilizadas para armar armas de fabricación casera.
Las pruebas halladas dan cuenta de una estructura organizada, que va más allá del simple robo y reventa de autopartes.
"No se trata solo de una casa con autos robados. Es una red con planificación, con maniobras para borrar huellas y hasta con presencia de armamento. Todo apunta a una organización criminal", explicó el comisario Diego Rebolloso, a cargo del operativo.
El lugar operaba como desarmadero fantasma.
El lugar estaba deshabitado al momento del allanamiento y no se registraron detenciones. Sin embargo, la causa sigue abierta, y la Justicia trabaja en la identificación de los responsables.
Fuente: Medios