El angustiante pedido del papá de una joven neuquina trasplantada
José Orellana reclamó la falta de atención y soluciones de la obra social. "Le dieron de baja y no hay stock de un medicamento clave para su vida", sostuvo.
Brisa Orellana Rossetti, una joven neuquina de 14 años, fue sometida a un trasplante de hígado en diciembre de 2018, a raíz de padecer un adenoma múltiple hepático hemorrágico. Desde entonces, su vida depende de una serie de cuidados y un tratamiento con dos medicamentos clave que debe tomar de por vida.
En las últimas horas se conoció que la obra social adujo no tener stock de uno de los remedios, pero además de que la habían dado de baja del sistema por cumplir 18 años.
La dramática situación fue planteada por su padre, José Orellana, en una entrevista realizada en LU5 donde el hombre no pudo contener la angustia ni la bronca. "No es la primera vez que nos pasa, se cagan en la salud de los afiliados", dijo el padre de la joven.
"Si ella no toma esos dos medicamentos, se muere. Así de sencillo", enfatizo José, quien indignado agregó: "Porque la gente tiene que pasar por estos momentos de angustia como nosotros. No pueden ser tan hijos de puta".
Contó que teniendo en cuenta que llegaba el receso estival y las fiestas de fin de año, el 18 de diciembre pasado fueron a la médica de cabecera para hacer la receta y presentar el pedido a la obra social. Fue allí que le entregaron uno de los dos medicamentos. La incertidumbre por el segundo medicamento recién tuvo una respuesta el pasado jueves 29: no tenían stock.
"La ley de trasplantado en el país dice que la cobertura que debe ser del 100 por ciento, y eso no se respeta. Esta no es la primera vez, estoy pidiendo lo justo y necesario para mi hija esté mejor", enfatizó Orellana.
A ello se le sumó otro drama cuando fueron a una consulta médica. "Este miércoles fuimos a hacer unos controles, porque pensamos salir unos días de descanso. Y ahí la doctora nos avisa que le dieron de baja de la obra social. ¿A qué estamos jugando?", recalcó en declaraciones a LU5. El hombre agregó que "no quiero ir al Instituto, porque sino tengo que ir a pelearme. No pueden jugar con la salud de las personas".
Minutos antes de la entrevista, desde la obra social le enviaron un mensaje de que "había sido un problema del sistema, pero ya está solucionado"
"Hoy era el último día que tenía de medicación, porque tenemos que pasar por esto", se preguntó Orellana, quien no descartó realizar una presentación judicial por abandono de persona contra el Instituto. "No es solo por mi, sino por todos los pacientes que esperan una respuesta desde hace tiempo", finalizó.
Fuente: LMNeuquén