Un mes sin Yéssica: la familia sigue esperando un milagro en el río

Este viernes se cumple un mes de la desaparición de Yéssica Antelo Terraza, la niña de 10 años que fue arrastrada por la corriente del río Limay en Balsa Las Perlas. Su familia, con los ojos fijos en el agua, se aferra a la esperanza de encontrarla con vida, mientras la búsqueda continúa sin éxito.

El día de la tragedia

El 7 de enero, en una tarde calurosa, Yéssica y su hermano Miguel, de 13 años, fueron a refrescarse al río junto a su perro. Al notar que la corriente se llevaba a Miguel, la niña no dudó en lanzarse para ayudarlo. "Si vos te vas, me voy con vos", le dijo antes de sumergirse en un sector profundo del cauce. Fue la última vez que la vieron.

La búsqueda incansable

Desde el momento en que la desaparición fue reportada, se desplegó un operativo con embarcaciones, buzos tácticos, policías y perros rastreadores. Sin embargo, el río no ha dado ninguna señal de Yéssica. A pesar del tiempo transcurrido, su familia se niega a perder la fe.

En su desesperación, su madre accedió a realizar "la prueba de la vela", un ritual popular que busca indicar el lugar donde podría encontrarse un cuerpo. "Cada madre tiene la esperanza de encontrar a su hijo con vida, y yo tengo la esperanza de encontrar viva a mi hija", expresó con dolor.

El impacto en la comunidad

Balsa Las Perlas quedó conmocionada por la desaparición. Amigos, vecinos y la Confederación Mapuche de Neuquén, que días antes había compartido una actividad cultural con la niña, se sumaron a la difusión del caso y a cadenas de oración.

Mientras el tiempo avanza sin respuestas, la familia de Jesica sigue mirando el río con la ilusión de un milagro.

Fuente: Medios