Dos mujeres salieron ilesas de accidentes graves en Neuquén: una manejaba alcoholizada
Una conductora de 35 años terminó entre álamos tras perder el control en la curva La Consuelo, mientras que otra, de 26, volcó su auto sobre un canal en estado de ebriedad. Ambos siniestros ocurrieron el domingo y refuerzan el llamado a la responsabilidad al volante.
Dos accidentes en pocas horas pusieron en evidencia la delgada línea entre la imprudencia y la fortuna al volante, con dos mujeres que salieron ilesas tras sufrir siniestros viales en la Ruta 7 y en la ciudad de Centenario. El primero ocurrió el domingo poco después de las 19:30, cuando una mujer de 35 años perdió el control de su Renault Logan mientras se dirigía desde Neuquén hacia Centenario. Al llegar a la curva conocida como "La Consuelo", cerca del Picadero, el vehículo se desvió y terminó en la banquina, impactando contra dos álamos.
Vecinos que transitaban la zona, ayudaron a la victima.
El choque se produjo en el lateral derecho del auto, lo que evitó que cayera a una laguna con agua acumulada por las recientes lluvias. El vehículo quedó atrapado entre los árboles, lo que también impidió que volcara. La conductora logró salir del habitáculo por sus propios medios, mientras otros automovilistas y vecinos se acercaban a auxiliarla.
La Policía de Tránsito de Villa Obrera y los bomberos voluntarios, bajo la coordinación de Patricio Álvarez, trabajaron para estabilizar el vehículo con tacos y retirarlo con el malacate del camión. Durante la maniobra, el tránsito fue interrumpido por algunos minutos, lo que generó demoras. Algunos automovilistas intentaron tomar un camino alternativo de tierra, pero este se encontraba anegado.
Horas antes, en la madrugada del mismo domingo, otra conductora de 26 años protagonizó un accidente de características similares pero con un agravante: manejaba en aparente estado de ebriedad. El hecho ocurrió en la Avenida Libertador, en Centenario, cuando perdió el control de su Chevrolet Corsa al tomar una curva a gran velocidad. El auto volcó y quedó parcialmente suspendido sobre un canal de riego.
Afortunadamente, la joven no sufrió lesiones, pero el test de alcoholemia confirmó que manejaba con un nivel de alcohol superior al permitido por la Ley Nacional de Tránsito. La infractora fue notificada y su vehículo quedó retenido por las autoridades.
Bomberos trabajando en el siniestro vial.
Ambos episodios refuerzan la importancia de la prevención, el respeto a las normas y la responsabilidad al conducir, especialmente en zonas urbanas y rutas transitadas. La combinación de velocidad, descuido y consumo de alcohol sigue siendo una de las principales causas de accidentes que, en esta ocasión, no dejaron víctimas, pero podrían haber tenido consecuencias mucho más graves.
Fuente: Medios.