Una empresa privada irrumpe en el conflicto ceramista por el predio de la fábrica

En medio de un conflicto que ya lleva semanas de protestas y cortes de ruta, los trabajadores ceramistas de Neuquén enfrentan un nuevo escenario que suma preocupación: una empresa vinculada a la logística petrolera y sanitaria habría manifestado interés en quedarse con el predio donde funciona actualmente la fábrica.

Aunque los detalles son aún escasos, la posibilidad de que el terreno pase a manos privadas encendió las alarmas entre los obreros, que este martes realizarán una asamblea clave para definir sus próximos pasos.

Las fábricas ceramistas gestionadas por sus propios trabajadores arrastran desde hace tiempo una compleja disputa con el Gobierno provincial y la cooperativa CALF, que reclama una deuda millonaria por consumo eléctrico. Esta situación derivó en múltiples protestas en el centro de la ciudad y cortes en la Ruta 7, además de denuncias por violencia y una creciente tensión con las autoridades.

Interés empresarial: ¿oportunidad o reemplazo?

En ese contexto, surgió una novedad que podría redefinir el futuro del predio. Según informó Nicolás Domínguez, referente de Cerámica Neuquén, una empresa de Buenos Aires visitó recientemente las instalaciones con el objetivo de instalar un centro logístico, aprovechando su ubicación estratégica.

"Tuvimos una reunión con el Ministerio de Producción. Nos dijeron que hay empresarios interesados en operar en la zona. Vinieron a ver la fábrica, quieren hacer logística y están gestionando un contrato con el Ministerio de Salud para eso", detalló Domínguez.

La propuesta, según explicó, contemplaría incluso la posibilidad de contratar a los mismos ceramistas para prestar servicios desde el predio. "Se habló de trabajar con nuestra gente. Nosotros queremos seguir produciendo, no quedarnos quietos", agregó.

Asamblea en puerta

Mientras tanto, los ceramistas se reunirán este martes en una asamblea general para evaluar el panorama. No se descartan nuevas acciones directas ni una panfleteada para difundir la situación ante la comunidad. La incertidumbre crece y la deuda continúa aumentando.

"Sabemos que cortar rutas complica a otros trabajadores, pero estamos en una situación muy difícil. Entre compañeros es duro sostener esto, más con nuestras familias atravesando esta crisis. Necesitamos una solución real", señaló Domínguez.

Hasta ahora, no hay confirmaciones oficiales sobre si la empresa avanzará con la instalación. Lo que sí está claro es que las negociaciones con el Gobierno provincial serán decisivas. ¿Se trata de una posible salida productiva para las fábricas autogestionadas o del inicio de un reemplazo encubierto?

Mientras tanto, los trabajadores permanecen en estado de alerta, a la espera de una solución que les permita sostener la producción sin perder el control del predio ni su fuente de trabajo.

Fuente: Medios